Alba y Nacho se conocieron en el colegio, pero su historia de amor comenzó en la universidad entre cafés y alguna juerga después de dejar los apuntes.
Más de una década después, Nacho le regaló a Alba un viaje a Londres, le sorprendió con un anillo y en menos de diez meses se dieron el ‘Sí, quiero’.
El 19 de octubre la pareja se casó en la Iglesia de San Gil, el mismo lugar que los padres de ambos.
Alba estaba preciosa con su vestido de novia a medida y personalizado a partir del modelo ‘Felizia’.
El diseño original era un dos piezas que convertimos en vestido, lo que nos permitió escotar más la espalda e incluir un tirante con un volante en el mismo tejido.
Estaba confeccionado en crepé y tul bordado en tonos azules y plateados y llevaba una cinta en la cintura con lazada en la espalda de terciopelo en tono azulado a juego de los botones y los zapatos de Marian Love Shoes.
Curiosamente, Nacho le había dicho que sabía que escogería nuestra firma porque “todos los vestidos de nuestras amigas que se lo han hecho allí te han encantado, tienen algo, ya verás». Y así fue.
Alba tenía las ideas muy claras, ella buscaba algo diferente y creo que con este vestido lo conseguimos, estaba espectacular y el toque de color le favorecía muchísimo.
La maquilladora Miriam Zapata fue la encargada de su beauty look y su prima María Jesús del peinado. Para completar su estilismo escogió unos pendientes de Suárez y un precioso ramo de La Florería.
Por su parte, Nacho estaba muy elegante con un traje de Silbon y gemelos de la joyería Javier Antón.
Al entrar a la iglesia Alba vio a su abuela materna y se paró a darle un beso antes de llegar al altar donde les casó Toño, el tío de Nacho que vino desde Los Ángeles para oficiar una ceremonia.
Sus amigos Marta y Manuel fueron sus padrinos de arras, diseñadas por Very Wood by Rachel B.
Al finalizar la ceremonia, los novios tuvieron la suerte de que todavía estaba la Virgen del Pilar con las flores de la ofrenda para hacerse alguna foto.
Después se trasladaron a la Finca la Quinta by Maher Catering que estaba preciosa para dar comienzo a la celebración.
Los novios hilaron su invitación con lugares emblemáticos de algunas ciudades que habían visitado juntos, con nombres de plazas y calles para las mesas (algunas de ellas con significado para los que allí se sentaban), todo elaborado por la empresa Eventos Ilustrados.
Tuvieron un cóctel y un banquete deliciosos y no pararon de repartir regalos, de reírse gracias a los videos de sus amigos, de exprimir el fotomatón de la empresa Fotomatón Aragón, la animación infantil de Mandrágora y de bailar hasta la 1 de la mañana, justo cuando empezó a llover.
Alba y Nacho disfrutaron muchísimo su gran día, y prueba de ello son las preciosas imágenes del fotógrafo Daniel Becerril. Enhorabuena pareja, os deseo toda la felicidad del mundo.
Y Alba, gracias por confiar en mí para un día tan especial e importante. Estabas espectacular.
¡Que seáis muy felices!
