Paraíso español
Ya, cuando piensas en un destino para tu luna de miel, casi siempre vienen a la mente lugares lejanos. Pero… ¿y por qué no España? Aquí tenemos lugares tan espectaculares como Menorca que nos lleva a pensar que el paraíso está más cerca de lo que imaginamos. Una isla de ensueño con playas de aguas turquesas, cuevas naturales, románticas puestas de sol, gastronomía mediterránea, pueblos medievales y además es un destino cercano. ¿Qué más se puede pedir?
El Peloponeso y las Islas Jónicas
A tres horas de vuelo desde Madrid se encuentra otro paraíso mediterráneo: Grecia. Las islas Cycladas (Santorini, Mykonos, etc.) son todo un reclamo pero existe una región menos turística que esconde auténticos paraísos en la tierra: el Peloponeso y las islas Jónicas. Una ruta en coche por los antiguos imperios que gobernaban el mundo (Atenas, Esparta, Corinto, Olimpia, Delfos…) hasta llegar a las espectaculares islas de Itaca, Zefalonia o Zakynthos donde se pueden encontrar rincones como la Playa del Naufragio, considerada la mejor del mundo. Ahí es nada.
Guatemala
Conocido como el país de la eterna primavera y situado en el corazón del mundo Maya, Guatemala es el destino perfecto para las parejas más aventureras. Gracias a su enorme diversidad, se puede disfrutar de piscinas naturales en medio de la selva, volcanes activos, ruinas mayas, ciudades coloniales, el Lago de Atitlán (una de las 7 maravillas del mundo) mercados indígenas, yacimientos arqueológicos, deliciosa gastronomía… ¿Sigo? 😉
Australia
Lo tiene todo y más. Australia es un destino perfecto para la luna de miel porque necesita bastantes días y hay tanto que ver, degustar, experimentar… que todos sus atractivos te dejarán boquiabierto. Es un país de contrastes. Por un lado puedes disfrutar de lo urbano visitando las famosas Sidney y Melbourne, y por otro encontrarás todo tipo de parajes naturales para vivir aventuras con su impresionante fauna (canguros, demonios de Tasmania, cocodrilos, koalas…). Es un país tan grande que un viaje así necesita bastante previsión y organización entre la pareja.
Transiberiano
El tren que conecta la Rusia europea con Asia. Un viaje diferente, sin duda. Su ruta principal va desde Moscú hasta Vladivostok y atraviesa casi 10.000 kilómetros, nada más y nada menos que 7 husos horarios. Pero no es un tren turístico, ya que es el que utilizan habitualmente rusos, chinos y mongoles para desplazarse por estos enormes territorios. Es un viaje para ir haciendo escalas y tiene vías secundarias que permiten visitar el desierto del Gobi o la Gran Muralla china. Depende del billete, puedes viajar con mayor o menor confort. ¡Una opción muy interesante! 😉
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