<<Quiero un vestido de novia con la espalda abierta pero no me veo con un escote muy cerrado por delante, ¿es posible abrirlo de algún modo?>>
Esta pregunta me la hacéis muchas, cuando escribís o venís al Atelier.
Es verdad que hay una tendencia de vestidos con grandes escotes en la espalda que son más cerrados por delante, con escotes tipo barco o caja, por aquello de compensar un poco. Hay casos en que si la novia luce mucha espalda, pide que la parte de delante sea más discreta. Pero también es cierto que hay muchas novias que no están acostumbradas a llevar escotes cerrados por delante y se ven mejor, y sobre todo se sienten más cómodas, con algo más abierto.
Si tú eres una de ellas te diré que no solo es posible, sino que además queda espectacular 😉 A mí personalmente, me encanta como queda la combinación y en todas las colecciones diseño por lo menos un vestido con esta característica (puedes recordar alguno de los modelos aquí y aquí).
Lo más importante en este tipo de vestidos tan escotados es que vayas cómoda y no tengas la sensación de que los hombros se te van a caer, sobre todo cuando el vestido lleva manga, que es cuando más se nota esa sensación. Para ello, además de un buen patronaje y confección del vestido, si quieres un plus de seguridad, existe la posibilidad de llevar un body como ropa interior, sobre el cual se sujetaría el vestido en los tirantes de este, en la zona de los hombros, mediante unas presillas (tranquila, está todo pensado 😉 )
El vestido que te muestro hoy, además de muy femenino, vaporoso y etéreo incluye también la característica de que tiene escotes en pico por delante y por detrás.
Este diseño tan romántico está confeccionado en crep de seda y gasa de seda, dos tejidos muy fluidos que le dan al vestido este movimiento tan bonito. En esta ocasión quería hacer una espalda un poco diferente e incluí un drapeado sujeto en los hombros mediante unas delicadas puntillas, que se ciñe en la cintura por detrás con una aplicación de macramé a juego y termina en una doble cola cuadrada rematada con puntillas de hilo y bordados.
Por delante, más sencillo, se ajusta el vestido al cuerpo con un entalle tipo fajín ancho bordado a mano con puntillas y rematado con unos pequeños botones forrados en la parte central.
Como el vestido lleva muchos detalles, en esta ocasión nos decantamos por un recogido bajo que dejará a la vista el trabajo de los hombros y la espalda abierta, así como un maquillaje muy suave y natural en tonos neutros y rosas.
Para las joyas elegimos unos pendientes con una flor de cristal que nos recordaba a las flores de macramé que lleva el vestido y al ser un vestido sin mangas, incluimos también una preciosa pulsera a juego.
Quería crear un look muy natural, de tonos suaves, así que para los zapatos, elegimos un diseño discreto en tono nude y para el ramo, una combinación muy silvestre en tonos verdes y blancos.
¿Qué te parece este look? ¿A ti también te gustan los vestidos con este tipo de escotes?
-CREDITOS-
Joyería: Barney Barnato
Peluquería-Maquillaje: Eva Pellejero
Ramos: La Lola se va de Boda
Zapatos: Franjul
Modelo: Isabel Obiols
Localización: Torre del Pino
Vestidos, Tocados y Fotografía: Martha Peters