Una boda romántica y otoñal

El vestido de Yolanda

Yolanda llegó a mi atelier con las ideas muy claras sobre cómo sería su vestido de novia. Buscaba un look muy natural con el que sentirse ella misma, así que nos pusimos manos a la obra y el resultado fue un romántico vestido en crepé de seda natural y tul plumeti en blanco roto con detalles en oro viejo. De talle a la cintura y cuerpo ajustado, con escote barco por delante y pico en la espalda en el que bordamos una puntilla de organza en la terminación. Las mangas eran de tul plumeti ajustadas, con el puño a juego de la misma organza, y botones en tono oro viejo. La falda, con caída y vuelo, también estaba elaborada en tul plumeti y, a modo de detalle, la cintura llevaba una aplicación realizada en oro viejo con pequeñas piedras. Un vestido muy femenino y aparentemente sencillo, pero lleno de detalles.

Por su parte, el novio fue vestido por el diseñador Nacho Ruberte de Zaragoza, especializado en trajes de novio desde hace más de diez años.

Yolanda y Jorge se casaron a finales de octubre de 2016 en la iglesia San Antonio de Padua, un lugar muy especial para ellos ya que sus respectivos padres se dieron allí el ‘Sí, quiero’ hace más de treinta años. Para su gran día Yolanda se decantó por mostrar dos looks diferentes. Para la iglesia y cóctel lució un recogido muy natural con su pelo rizado, ligeramente desecho, con una corona trasera de “Entrecuentas y dedales”.

Y, más tarde, para entrar al banquete la novia se soltó la melena y se puso una corona regalo de una de sus mejores amigas, elaborada por “Eva Vidal tocados” con frutas, moras, libélula, etc.

A modo de complementos lució unos pendientes, herencia de su familia y la pulsera que le regaló su amiga de la infancia.

Yolanda le dio un toque dulce y muy chic a su look añadiendo un velo de seda en tono rosa empolvado.

El ramo de novia fue un regalo de su sobrina Alba. Acertó de pleno con esta creación en tonos otoñales, al igual que la decoración del enlace, muy romántico y silvestre en totalidades marsala y mezcla de texturas: rosas inglesas, fucsias, hortensias otoñales, eucalipto… A juego con los zapatos hechos a medida en Salo Madrid (Zapatos con alma)

El color marsala protagonizó el enlace celebrado en la Finca Torres del Pino, en la que los invitados pudieron disfrutar de un maravilloso catering de José Fernández. Los novios diseñaron la decoración de las mesas junto al florista Nacho Bergara, inspirados en los bodegones, piñas, granadas, bases de musgo, velas y flores.

La organizadora de eventos y amiga de los novios Melodia Eventos se encargó de que todo estuviera en su sitio. Montó una Candy bar que fue todo un éxito en la que había pastas artesanas, chupa chups de gin tonic y mojito o caramelos artesanos con las iniciales de los novios.

Los fotógrafos Patricia Bara y Carlos López fueron los encargados de inmortalizar este enlace pensado al milímetro en el que no faltó detalle.

Además, Alicia y Andrea de alCuadrado grabaron los momentos más emocionantes de la boda.

Tras el baile, Yolanda se cambió de zapatos y se puso unas zapatillas Victoria Custom Novia de Love Story Novias. Sin duda un cambio muy divertido y original.

Los más de 200 invitados vivieron una celebración entrañable, romántica y repleta de detalles en la que no dejaron de disfrutar durante toda la velada. Yolanda, mi más sincera enhorabuena, ¡estabas preciosa! Felicidades pareja.

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