Un vestido de novia en blanco y negro

Novias Reales Martha Peters

Silvia vino al evento de presentación de la colección Novia 2016, en septiembre de 2015, acompañada por su hermana y aquel día se fijó en dos vestidos que poco tiempo después se probaría. Ella buscaba un modelo diferente, con el que se identificara, y que de alguna manera reflejara la ausencia de su madre. Organizada y detallista, planificó todo hasta el último detalle y el 3 de septiembre de 2016 llegó el gran día de Silvia y Raúl.

Elaboramos su vestido en crepé de seda, con cuerpo ligeramente ablusonado y detalles de terciopelo negro con perlas blancas y cristales en los hombros y en el cinturón. Un diseño basado en el modelo Lena de la colección 2016, el cual adaptamos a su gusto incorporando una manga corta y eliminando los volantes originales. A modo de complementos, llevó los pendientes de diamantes y la mantilla de su madre y la liga que le había regalado la mejor amiga de ésta. Los zapatos eran de Love Story Novias y el peinado y belleza se lo hizo su buena amiga argentina Mariana. Las flores, de Nacho Bergara, reflejaban los gustos de la novia por los colores vivos y su estilo moderno.

Celebraron una emotiva misa en la iglesia de San José de Pignatelli en la que cantó The Gospel Wave Choir, destacando una canción de su infancia ‘Virgen morenita’, que hizo llorar a muchos de los asistentes. Para la celebración se trasladaron al Gran Hotel de Zaragoza. Durante el cóctel, los invitados se divirtieron haciéndose fotos con una polaroid y así el libro de firmas fue de lo más original. Toda la gráfica del enlace la diseñó tres estudio creativo cuyo director estaba entre los amigos.

Raúl y Silvia entraron al banquete al ritmo de ‘Madre tierra’ de Chayanne y, de manera espontánea, la novia se arrancó a bailar alrededor de su recién estrenado marido.

A modo de detalle repartieron réplicas del ramo a Marta, Marián, Jesús, Dori y Concha con canciones que cada uno de ellos identificarían nada más empezar a sonar. El ramo lo entregaron a Piero, amigo y entrenador de ambos, con la música de Andrea Bocelli. Y, sin que la ‘controladora’ novia se lo esperase, apareció Raúl con un ramo de rosas que la dejó sin palabras.

Después del tradicional vals y de un swing, la fiesta pasó a la discoteca donde a las invitadas les tenían preparadas unas cómodas bailarinas y a todos una mesa dulce para reponer fuerzas y aguantar hasta altas horas de la madrugada. Se proyectaron varios vídeos, uno de ellos muy emotivo con fotos de las bodas de todos los asistentes.

Las imágenes de su preciosa boda fueron realizadas por la empresa de fotógrafos Shoot Love Photography.

¡Espero que os haya gustado!

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